

EEUU sanciona el comercio de petróleo iraní pese a la negociación por el acuerdo nuclear
Estados Unidos impuso el jueves una nueva tanda de sanciones en el marco de su estrategia de presión contra Irán por su programa nuclear, esta vez dirigidas contra una refinería china de petróleo iraní, a pesar de las negociaciones en curso para lograr un acuerdo sobre el tema.
"Estados Unidos mantiene su determinación de intensificar la presión sobre todos los elementos de la cadena de suministro de petróleo de Irán para evitar que el régimen genere ingresos para avanzar en su agenda desestabilizadora", declaró el secretario del Tesoro, Scott Bessent, en un comunicado.
Entre las sanciones anunciadas se destaca una contra el Grupo Químico Hebei Xinhai, acusado de refinar ilegalmente petróleo iraní en la provincia septentrional de Hebei.
También se sancionaron tres operadores de terminales portuarias en la provincia de Shandong (este de China) "por su papel en la compra o entrega de petróleo iraní por un valor acumulado de varios cientos de millones de dólares".
Además, figuran en la lista empresas, embarcaciones y capitanes de navíos "involucrados en el transporte de petróleo iraní hacia China, dentro de la 'flota fantasma' de Irán", señaló el Departamento de Estado en un comunicado aparte.
Washington acusa una vez más a Teherán de usar este dinero para financiar grupos calificados de "terroristas".
El Departamento de Estado dijo que esta es la tercera medida de Estados Unidos contra una refinería de pequeña escala en China desde principios de febrero, cuando el presidente Donald Trump emitió un decreto para aumentar la presión sobre la república islámica.
Sin embargo, Trump también ha declarado que tiene esperanza de alcanzar un acuerdo sobre el programa nuclear de Irán.
Estadounidenses e iraníes, enemigos desde hace cuatro décadas, iniciaron el 12 de abril conversaciones sobre este espinoso tema bajo la mediación de Omán.
Estas discusiones tienen como objetivo concluir un nuevo acuerdo que impida a Teherán dotarse de armas nucleares, una ambición que Irán siempre ha negado tener, a cambio de la eliminación de las sanciones que paralizan su economía.
Tanto Irán como el enviado de Trump, Steve Witkoff, han calificado las conversaciones iniciales de positivas.
En el primer mandato de Trump (2017-2021) Estados Unidos se retiró de un acuerdo nuclear previo con Irán e impuso amplias sanciones, incluidas a otros países, entre los cuales China es el más significativo, para que dejen de comprar petróleo iraní.
X.Fitzpatrick--NG