"Mi mayor sueño": Taylor Swift anuncia que ya es propietaria de su música
La cantante y compositora estadounidense Taylor Swift anunció este viernes que compró los derechos de sus primeros seis discos, poniendo fin a una batalla de seis años por la propiedad de su obra.
"Toda la música que he hecho... ahora... me pertenece", dijo la artista en una carta manuscrita publicada en su página web, en la que agradece a sus fans el "apasionado" apoyo durante su batalla para recuperar los derechos de sus primeros álbumes de estudio después de que la discográfica en la que los grabó fuera vendida.
Esto incluye, "los videos musicales, las películas de mis conciertos, el arte y la fotografía de mis discos, las canciones no publicadas, las memorias, la magia, la locura. Cada gira. Todo el trabajo de mi vida", explica.
"Decir que mi mayor sueño se ha hecho realidad es poco", dice la superestrella de 35 años que inició su carrera en la música country.
Swift habría pagado al fondo de inversión Shamrock Holdings, el último propietario de su música, 360 millones de dólares para adquirir los derechos de su obra, según la publicación Billboard.
Este acuerdo pone fin a una batalla por los derechos de su música que ha durado seis años, desde que en el verano de 2019 el magnate de la industria Scooter Braun compró la discográfica Big Machine, que publicó los primeros seis discos de la artista.
Braun luego la vendió al fondo de inversión Shamrock Holdings por supuestamente 300 millones de dólares.
La megaestrella del pop empezó a regrabar con enorme éxito cuatro de los seis primeros discos que llevan el sello "Taylor's Version", en un esfuerzo por devaluar las grabaciones originales.
Los otros dos, "Reputation" (2017) y el primero "Taylor Swift", que ya ha regrabado, "pueden tener su momento para reemerger en el momento apropiado", si los fans así lo quieren, asegura la ganadora de cuatro Grammy al Mejor Álbum, la primera artista en conseguirlo, superando a Frank Sinatra, Stevie Wonder y Paul Simon.
- "Sin ataduras" -
"Todo lo que siempre he querido es tener la oportunidad de trabajar lo suficientemente duro como para poder comprar algún día mi música sin ataduras, sin asociación, con total autonomía", escribe Swift.
La compositora de uno de los mayores éxitos planetarios, "All too well", agradece el "apoyo apasionado" de sus fans y a la exitosa gira Eras Tour de dos años -que concluyó en diciembre pasado con una recaudación de más 2.000 millones de dólares tras 179 conciertos de más de tres horas cada uno-, que le han permitido "comprar" su música, escribe.
Asimismo, agradece al fondo de capital Shamrock que se avino a negociar con ella. "Fue un acuerdo comercial para ellos pero siento que entendieron lo que suponía para mí: mis memorias y mi sudor, mi escritura, y mis décadas de sueños", asegura.
La acalorada disputa, junto a la determinación de la cantante por volver a grabar sus primeros discos, abrió una discusión sobre quién es el dueño del trabajo de un artista, además de las condiciones en las que los jóvenes talentos firman sus contratos.
El propietario de los lucrativos 'masters' -material único usado para crear vinilos, CD y copias digitales- tiene potestad para determinar cómo se venden y se reproducen las canciones.
El sello de Nashville Big Machine publicó "Fearless" en 2008, un primer gran éxito que mezclaba pop y country que le daría cuatro Grammys a Swift, incluyendo el de Mejor Álbum del Año, y que vendió más de 10 millones de copias en Estados Unidos.
Poco antes de que las desavenencias entre Swift y Braun se hicieran públicas, la estrella firmó un nuevo gran contrato con el grupo Universal Music que le dio el control de sus 'masters' de ahí en adelante.
A.Kenneally--NG